Juegos recreativos con fronteras o áreas delimitadas

Uno de los aspectos que caracterizan a los juegos es que se realizan dentro de un área delimitada. La zona de juego es una zona especial con límites claros para los participantes.

Eso es muy claro por ejemplo en los juegos deportivos, o competencias. Todos conocen muy bien cuál es el área, el terreno, la cancha, y en todo momento mientras dura cada juego, todos saben lo que se permite o no dentro de ella. 

Propiamente en los juegos recreativos, esa zona es flexible y puede cambiar de una partida o sesión de juego a otra, los participantes pueden ampliar o disminuir esa zona delimitada cada que quieran,  dependiendo de las necesidades: mayor o menor espacio, el tipo de juego, la cantidad de participantes; poniéndose de acuerdo para hacerlo. 

¿Cómo crear esa frontera, delimitar el área de juego?

Hay diversas maneras de hacerlo por ejemplo usando conos, adobes, sillas, baldes o cubos, palos, banderines, cuerdas, cintas. También podemos  utilizar límites identificables que ya existen en el área de juego, como marcas en el piso, una línea de plantas, una acera, un poste. Pero teniendo en cuanta que esos elementos no pueden convertirse en un peligro para los jugadores, donde puedan golpearse o enredarse y caer.

Se recomienda que para los niños mayores las fronteras o terrenos de juego sean grandes y para los niños de menor edad, zonas de juego más pequeñas. A mayor número de jugadores, se requiere mayor mayor espacio. 

Cuando se trate de un espacio muy amplio, como una cancha o patio grande, podemos usar, además, elementos que ayuden a dar indicaciones, animar o controlar al grupo, como un pito o megáfono. para

Líneas de salida y llegada: 

Es conveniente  y necesario para muchos juegos que contemos en el terreno de juego con con líneas muy precisas de salida o de llegada, por ejemplo al organizar carreras.

Una recomendación a tener en cuenta es aprovechar las demarcaciones que ya se tienen en las canchas de diversos deportes, como el fútbol, baloncesto, voleibol, tenis, etc., para demarcar muy específicamente el terreno que le toca o corresponde a los participantes cuando en el juego hay confrontación de dos equipos. Así, cada equipo sabrá cuál es su área de juego y cuál le toca al equipo contrario.

Recorridos con obstáculos:

Muchos juegos permiten aumentar el nivel de dificultad mediante la creación de
un recorrido de obstáculos. Puedes usar los árboles, muebles de jardín, cuerdas, banderas, conos o cualquier cosa del entorno para crear obstáculos que pasar a rastras, saltar, correr o para añadir una nueva dimensión al juego. Asegúrate de que los obstáculos son seguros y comprensibles para los jugadores.

Contenido simbólico del terreno de juego:

Es claro para todo jugador o participante de cualquier juego, que hay cosas que puede hacer  o no dentro de esa área de juego. Dentro de ese espacio o territorio es posible imaginar lo que sea, por ejemplo: decir que quien está dentro del terreno de juego puede volar, o que tienen poderes, o que no puede hablar, que tiene que arrastrarse, o caminar de cierta manera, o imaginar que es determinado personaje: un héroe, un pirata, un robot, o un animal, un monstruo... En ese espacio, cada jugador puede echar a volar su imaginación y salirse de la realidad, sabiendo que al salir, la realidad vuelve a imponerse.

Ejemplos de juegos que requieren un área delimitada para desarrollarse:

A continuación, te comparto una serie de juegos donde es claro que requerimos un área delimitada para desarrollarlos.

Palifútbol:

Imagen de pinterest

Jugar al fútbol usando elementos como palos de escoba, nos puede dar muchas variantes.
Para jugar el palifútbol, necesitamos un palo de escoba (o la escoba completa) por jugador y una pelota liviana, o si se quiere, usar globos.
Se arman las porterías y se define el espacio de juego.  Se arman los equipos y se inicia el juego.

Juego de quemados:

Imagen de pinterest

Juego o competencia para dos equipos.
Se trata de quemar o ponchar a los del equipo contrario antes que los otros. 

Se reparten todos por el área de juego delimitada. Cuando un jugador tiene el balón, intenta golpear a un jugador del equipo contrario y si lo logra, lo "quema" o "poncha". Ese jugador sale del juego eliminado. Mientras un equipo conserve el dominio del balón, intenta ponchar al otro, los jugadores pueden  pasarse entre sí el balón para sorprender a los contrarios. 

Si le lanzan la pelota a un jugador y éste logra atraparla en el aire, sin dejarla caer, se apropia de ella y pasa al dominio de su equipo, para empezar a ponchar o "quemar" al contrario. 

Defender a la Reina:

Para dos equipos. Para este juego necesitamos globos llenos de agua.

Dividimos el espacio en dos, con una tiza. Luego Trazamos otras dos líneas, a cada lado de la que está en el centro, a unos 5 metros. Detrás de esas líneas se ubicará cada equipo.

Y un poco más atrás, dibujamos un círculo, allí se sentará la reina.

Se ubican unos frente a otros. Escogen quién será la reina (o el Rey)

Cuando los equipos se organicen, se entrega a cada uno una bolsa  o balde y entre 10 y 20 globos. Deben lanzar los globos por turnos, de 5 en cada turno, tratando de impactar a la Reina o Rey del equipo contrario. Los miembros de cada equipo deberán proteger a su reina para que no la golpeen con los globos llenos de agua.

Si un jugador lanza y otro del equipo contrario toma en el aire el globo y éste no se revienta, lo puede devolver de inmediato para golpear a la reina del contrincante.

Gana el equipo que logre darle a la reina del equipo contrario.

Leer también:

Colección de 50 Juegos, retos y competencias por equipos.

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Imagen de cabecera, tomada de: fundacionarcor.org/es